Llegados a este punto, quizás la mejor opción es buscar ayuda de algún profesional. En este caso las medidas preventivas quizás ya llegan tarde. Es la culminación de un proceso gradual donde cada vez se pasan más horas ante la pantalla y menos horas haciendo otras cosas: tareas del hogar, estudiar o hacer los deberes, quedar con amigas, practicar deporte, aprender a tocar un instrumento, etc. Por lo tanto, no es que de un día para otro se pase horas y horas, sino que poco a poco seguramente ha ido aumentando el uso del ordenador pasando del uso al abuso y, quizás, a la adicción.